sábado, 19 de diciembre de 2015

Star Wars o los males de la nostalgia

Afiche original de lanzamiento (haz click)
   Antes de pasar a elaborar mi humilde opinión quiero advertirles que esta reseña está totalmente llena de spoilers; lo que quiere decir que si aún no han visto la película pero continúan la lectura les arruinaré las sorpresas y revelaciones.

   ¿Siguen ahí? Pues bien, resumiré mi opinión en una sola frase: me decepcionó... ¡Bastante!

   Me decepcionó porque la historia, si bien abre unas líneas argumentales interesantes, tales como qué son los Caballeros del Ren, quién es el líder supremo Snoke y por qué teme tanto a Luke Skywalker, de dónde nacen las habilidades aparentemente innatas de Rey, etc., estas preguntas fueron presentadas en una película que me atrevería a definir como un simple y mero remake del Episode IV, la película original de 1977.

miércoles, 7 de octubre de 2015

2015: un año de conmemoración personal

   No sé por qué, pero los números que la cultura popular -más no la teoría matemática- llama "redondos" siempre me han gustado bastante. Imagino que es entonces por eso que los años terminados en '0 o '5 siempre los asumo como "años significativos".

   Repensándolo, lo anterior quizá sea debido a una conexión inconsciente -y nada original- con la tradición universal que valora, con mayor carga conmemorativa, los aniversarios llamados "de Plata" (25 años), "Oro" (50) y "Platino" (75) (por no hablar de los centenarios) y que, cuando aún no se alcanzan, se consuelan con unidades de diez, tales como los "décimo", "vigésimo", "trigésimo" aniversario, etc. Es decir ¿algún vez han visto un DVD o CD conmemorativo por el "17° aniversario" de una película clásica o el "22° aniversario" de un disco famoso? ¡No! ¿La gente se hace un drama cuando cumple 30, 40 o 70 años o cuando cumple 26, 32 o 55? Nuestra cultura está montada en una escala decimal y es sobre ella que se marcan los hitos.

   2015, por tanto, me invitaba desde lo recóndito de mi cerebro y en forma insistente, a buscarle un significado, emotivo e importante, que me obligase a vestir de etiqueta, pronunciar un discurso y beber champagne...




lunes, 5 de octubre de 2015

¿Por qué?

   ¿Por qué es tanta la gente que me critica vainas, válidas o no, pero que luego se rasga las vestiduras en llantos de ofensa cuando les pago con la misma moneda?

   Tengo un amigo al que le gusta el chaleco y la jodedera constante -eso que ahora el mundo occidental en pleno llama bullying- aunque lo hace sólo verbal y sin pasarse de la raya, es decir, cero agresiones físicas ni humillaciones públicas, en criollo, lo que dije arriba, joder y chalequear. A veces me critica vainas que no puedo negar que son ciertas, otras que yo no valoro igual que él pero qué sí puedo entender que a otros le molesten y finalmente, otras veces son cosas que no veo qué tienen de malo ni puedo entenderlo cuando él u otro me las explica pero vale, lo tolero porque así es la vida... Sin embargo, cuando yo me le arrecho y respondo... ¡Noo joda! Mejor es que no.

   Otro caso es el de una amiga que, para más colmo, cuenta con un firewall a prueba de balas que son todos los demás miembros del grupo, es decir, además de lo que pasa con el caso anterior, ésta tiene a todo el grupo siempre y en todo momento a su favor, de modo que si yo respondo, contra-critico o siento que ha llegado mi justo momento de chalequear y joder, no sólo ella me pone cara seria, me habla golpeado y me pela los ojos vidriosos, a medio camino entre víctima ofendida y sincera arrechera, sino que además me salta encima la tribu entera, me critican por intolerante y quedo yo como un bully de mierda.

   ¿Por qué, vale? ¡¿POOOOOR QUEEEÉ TANTA INJUSTICIA?!

viernes, 26 de junio de 2015

Decisión 2.0

   Estoy por primera vez considerando cerrar mi Facebook. Sería una acción difícil por diversos motivos, donde el hecho de que soy adicto es lo de menos.
De ahora en adelante...

jueves, 11 de junio de 2015

Sueño del 11 de junio

   Llego a la casa desde la UCAB. Nos tomó casi una hora desde Montalbán a La Trinidad, con el calor del medio día, sin a/c en el carro -porque se nos dañó el lunes- y con sueño porque en la madrugada me despertó una indigestión, seguramente producto de todo el dulce que me metí anoche en casa de los Maldonado.

   Me siento en el mueble de la sala de televisión a darle un poco de carga al tlf. mientras hago tiempo para subir a calentarme el almuerzo. Son las 2:00 p.m.

viernes, 5 de junio de 2015

Diario (1)

   Mis padres utilizaban sus agendas como micro diarios. Desde hoy haré lo mismo en este espacio.

   Esta semana cumplí un mes en el nuevo trabajo y ya amenazaron con botarme. Ignacio me acusa de improductivo, poco servicial e irresponsable. Lunes y martes no pude asistir por culpa de problemas domésticos pero no lo llamé para advertírselo. Creyó que tampoco había trabajo miércoles y jueves porque no me vio, pero sí lo hice, quedándome hasta las 8:00 p.m., pero era tarde: ya me había rayado...

   Hoy me siento un verdadero inútil. Siento que no sirvo para nada salvo para dar clases. El año pasado Desiree me acusó de, mutatis mutandis, exactamente lo mismo de lo que me acusó Ignacio hoy. Creo que tienen razón y por eso me siento terrible.

   ¿Puede ser mi casa? ¿No me atrevo inconscientemente de abandonar mi zona de confort incluso al precio de perder las oportunidades que me dan los demás?

   Sin embargo y con total independencia de la eventual validez de sus argumentos, creo que la gente me tiene poca paciencia. Me he convencido de que soy una inversión a largo plazo. Quizá muy a largo, pero lo soy. Si tan solo los demás se dieran cuenta...

miércoles, 27 de mayo de 2015

Lo que revela el silencio, pt. 1

   Exactos quince años atrás, entre febrero y abril de 2000, cumplía ya tres vueltas al Sol el noviazgo más largo que he tenido. Éste había empezado con buen y prometedor pie en enero de 1997, justo cuando cursaba el primer semestre de Biología en la Universidad Central de Venezuela, cumplía la mayoría de edad y comenzaba a preocuparme, cual si fuera gringo, por cómo, cuándo y dónde podría comprarme una vivienda propia...

   Los primeros dos años de aquella relación formaron parte del que considero el período más feliz de mi vida, sin embargo, para el momento en que dio inicio el nuevo milenio, sentía que muchas cosas no me estaban fluyendo como quería, como proyectaba o como deberían. No me sentía a gusto con la carrera, el dinero me duraba cada vez menos, el carro se jodía cada vez más, el país se encaminaba por un terrible derrotero luego de haber cometido el peor error de su segundo siglo de historia republicana y mi noviazgo se sentía pantanosamente estancado. Carente de estímulo, sin novedad, aburrida y repetitiva, la relación seguía casi exactamente igual que como había empezado y, para más colmo, la frustración generaba roces, desencuentros y hasta peleas.

jueves, 23 de abril de 2015

La chapuza de Chappie

Afiche original de lanzamiento (haz click)
   District 9 (2009) es un perfecto ejemplo de esas películas -que aparecen aproximadamente una vez por década- que marcan un antes y un después en la historia del cine. Para mayor gloria, lo hace a varios niveles: técnico, visual, argumental, social y cultural. Y por cereza en la punta del helado lo corona el hecho de que se trata de una opera prima.

   De ahí que cada vez que su joven director, Neill Blomkamp, anuncia su próxima película, a todo lo largo del planeta, cinéfilos y entusiastas de la ciencia ficción aguanten la respiración con fidedigna alegría. El resultado, sin embargo, ha satisfecho a pocos... O por lo menos no a mí ni al conjunto de críticos que leo y que tengo por referente. Y no una, sino ya dos veces.

   Esta reseña de Chappie (2015) es la de un fanático decepcionado, escrita al calor de quien acaba de llegar del cine sin ganas de tan siquiera contar en dónde andaba metido... Por tanto, escojo hacerla a manera de lista que sintetice todo lo que, para mí, no funcionó.

domingo, 8 de febrero de 2015

Lo visto en 2015

Esta bitácora la inicio con la intención de registrar todas las películas que iré viendo en este año que apenas comienza. La cuenta oficial la llevaré en un documento Excel

Como Louis XIV y Napoléon Bonaparte, soy coleccionista de datos y estadísticas (y también un megalómano)

viernes, 23 de enero de 2015

Y finalmente llegó el día...

Tomado de DeviantArt.com. Es un poco dramático, pero me gustó.
Y finalmente llegó el día en que entendí
lo liberadora que puede llegar a lucir la muerte.
Entendí que no tiene que ser un castigo.
Entendí porqué tanta gente la escoge y
aprendí a perdonarlos. Ya no los odio.
Ahora los entiendo y compadezco.

Tarde, peros seguro.

sábado, 3 de enero de 2015

Sueños del 3 de enero

   Esta mañana soñé que de nuevo era alumno en el último año del colegio y, al llegar, me encontraba con la sorpresa de que la baranda del pasillo que conducía a mi salón había sido removida, por lo que no existía nada que lo protegiera a uno de caerse en caso de resbalar o acercarse mucho al borde.

    Al entrar al aula -tarde, como siempre-, un profesor que no reconocí -mi cerebro inventó un maestro genérico para la ocasión- dijo "Lo bueno de esto es que si se pone fastidioso, podemos hacer así con Sebastián" y acto seguido arrojaba un cojín de colores -con patrones como lo que tenían mis padres cuando nací- por el borde y hacia el suelo, dos pisos más abajo, y como si lo hubiese entendido a manera de orden, se paró Pablo Abreu -quien, curiosamente, no estudió conmigo el bachillerato en el Friedman, sino la primaria en el Michelena- dispuesto a lanzarme por el mencionado borde, ante la risa de todos, sin que nadie saliera a defenderme.